viernes, 25 de septiembre de 2009

Juego encarnado

No despertaré de este sueño
que me lleva a tu lado
entre cobijas impregnadas
con la dulzura de tu rostro.

Un sueño aglomerado, distante,
pero tan claro como el agua
en la que sumerjo todo lo que sirve
a esta pasión desbordada.

Los gritos perturbados y acallados,
La complicidad del silencio en la noche,
la balada en la bocina del estéreo
y la simplicidad de tu cuerpo desnudo,
no permiten nunca que despierte,
no dejan siquiera que abandone
esta sensación de selva desparramada.

El beso, tus brazos, tus labios,
tus manos en lo prohibido,
mis manos avasallando,
tu lengua enredada con la mía
en libre juego desordenado;
tu mirada al infinito…
La blancura de tu piel sonrojada,
el sabor plateado de tu carne,
el camino que recorre mi boca
y el aroma que arde en lo escondido.

Este es el juego encarnado,
el fantasma de la madrugada,
un sueño que se repite
cuando te envuelvo en mi cama.

1 comentario:

Unknown dijo...

Hola acabo de verte en facebook y he leido juego encarnada.. hermoso realmente hermoso.. eres una persona muy sensible.. felicitaciones